Oxígeno para cuidar la piel




El oxígeno para cuidar la piel es una de las últimas tendencias en tratamientos y productos faciales.

El oxígeno es de los mejores desinfectantes y es ampliamente utilizado por la comunidad médica en múltiples procedimientos. Además es un factor súper influyente en el mantenimiento y restauración de una piel sana.


¿Cómo es relevante el oxígeno?


El agua está compuesta de oxígeno e hidrógeno y nuestro cuerpo es 70% agua y necesitamos mantenerlo hidratado para estar sano y tener una piel perfecta. 



Con el pasar del tiempo, el envejecimiento y otros factores del medio ambiente que reducen los niveles de oxígeno debajo de nuestra piel. Las paredes de los vasos capilares se hacen más gruesas por las toxinas que acumulan resultando en un deterioro visible de nuestra piel.


Mientras más envejecemos menos oxígeno producimos. Al llegar a los 24 años producimos 40% menos oxígeno que cuando nacimos. 



La falta de oxígeno en nuestra piel ocasiona:

  • Disminución en la producción de colágeno lo que debilita las fibras de elastina y hace que pierdan su capacidad para conservar el agua.
  • Disminución de la actividad capilar que debilita los procesos naturales de nutrición de la piel y frena la regeneración celular.
  • La piel se hace mucho más delgada y empiezan a aparecer arrugas y manchas.
  • Aumento en la producción de sebo y la acumulación de bacterias, obstruyendo los poros y provocando reacciones en la piel.

Tratamientos faciales de oxígeno 

El facial de oxígeno es un tratamiento spa que ofrece una mezcla de oxígeno hiperbárico u oxígeno puro a una presión elevada mezclado con crema hidratante, antioxidantes y vitaminas, aplicado mediante un aerógrafo.

Es un tratamiento que ayuda a rellenar la piel, disminuyendo la aparición de arrugas y aumenta la circulación. Además ayuda a luchar contra los signos del envejecimiento y a su vez, si deseas combatir los efectos del acné y de la rosácea. Otro beneficio de este tratamiento es que deja la piel perfecta para luego ser maquillada.

Pero, como todo tratamiento, requiere de sesiones periódicas para mantener los beneficios. Al inicio se deben hacer sesiones una vez por semana durante seis semanas y luego regresar una vez al mes para hacer un mantenimiento. Lo malo de este tratamiento es que es muy costoso, por lo que muchas mujeres se vuelcan mejor a consumir productos faciales a base de oxígeno.


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